De las iglesias de la Reconquista.
Situada en pleno corazón del barrio que lleva el mismo nombre y popularmente llamado el «barrio de los toreros», quizá sea la iglesia que cuenta con más sabor de la época.
Su aspecto es de fortaleza por los cuatro contrafuertes de su fachada, con portadas abocinadas y adornadas con nervaduras que sostienen medias columnas coronadas con capiteles románicos.
Así como las iglesias de la misma época su planta es rectangular, con tres naves, y la central es más alta que las laterales.
Cabe destacar en su interior la Capilla de los Orozco que presenta una bella portada de yesería mudéjar del s. XV, y en ella están enterrados los famosos comendadores de Calatrava que inspiraran a Lope de Vega su inmortal obra «Los comendadores de Córdoba».
También merece destacarse su retablo con pinturas de Antonio del Castillo y una magnífica escultura, la de la Virgen de la Luz, del escultor cordobés Gómez de Sandoval.