Crucero, de original cúpula, y la capilla octogonal del Sagrario, que se abre en el brazo del evangelio.
La airosa torre de ladrillo, con campanario octogonal, data de 1767. Conserva el templo dos retablitos barrocos y otros dos neoclásicos, éstos procedentes -como otras obras artísticas- del antiguo convento de Carmelitas Descalzos, edificado en 1682, del que subsiste la portada plateresca.
Cerrando la calle Remedios se halla la ermita de esta advocación (antes, Nuestra Señora de la Cabeza), del siglo XVIII.
Guardan ambos templos interesantes imágenes de los siglos XVII y XVIII.
En el Ayuntamiento se puede apreciar una colección de pinturas de José María Labrador, hijo del pueblo.